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Fracturas de dedos de la mano multifragmentarias: resolución a partir de inserción de tornillos canulados

18 agosto, 2017

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El paciente, varón de mediana edad, presenta graves fracturas de dedos multifragmentarias por aplastamiento en las falanges proximales del tercer, cuarto y quinto dedo de su mano izquierda. El Dr. Piñal opta por su técnica de inserción de tornillos canulados para facilitar la osteosíntesis.

Imágenes radiográficas de las fracturas conminutas del paciente
El paciente presenta fracturas conminutas en los dedos medio, anular y meñique de su mano izquierda. Las radiografías superiores muestran la gravedad de las mismas, con la dispersión de las zonas afectadas en múltiples fragmentos óseos.

El problema

Las fracturas de dedos multifragmentarias o conminutas presentan la dificultad adicional de la quiebra del hueso en fragmentos diversos. Su abordaje convencional mediante la fijación ósea de los mismos con agujas de Kirschner alarga la duración del procedimiento e impide al paciente la movilización hasta 3-4 semanas después de la cirugía.

Las imágenes de tomografía axial (TAC) permiten observar el cuadro preoperatorio de fracturas multifragmentarias de las falanges proximales del paciente.

Durante este periodo de espera pueden producirse complicaciones como la adherencia o ‘pegado’ de los tendones al hueso, lo que provoca pérdidas de función en la zona afectada tras la recuperación de la fractura.

Técnicas descartadas por el Dr. Piñal en casos similares
En la doble imagen izquierda, radiografía (las líneas son artificios de imagen generados por elementos metálicos de las gasas) y resultado de aplicación de agujas de Kirschner en fracturas de dedos. Puede apreciarse la pérdida de movilidad tras la cirugía y curación de las zonas fracturadas. Además de esta técnica, el Dr. Piñal descarta también el uso de placas para alcanzar la osteosíntesis en este perfil de casos (doble imagen derecha) al implicar una duración de la cirugía notablemente mayor y un periodo de inmovilización más largo, junto con un nivel más elevado de incertidumbre sobre su resultado final.

Junto al daño óseo, el trauma sufrido provoca al paciente heridas de consideración, intervenidas de forma previa a su llegada a la clínica del Dr. Piñal.

Heridas por aplastamiento y movilidad a la semana de la intervención del Dr. Piñal
El paciente sufrió heridas por aplastamiento de consideración en su mano izquierda, tratadas antes de su atención por el Dr. Piñal. Como nota complementaria, la imagen muestra ya la recuperación funcional de la extremidad tan solo una semana después de la intervención realizada por el cirujano cántabro.

Los objetivos

Las metas fundamentales del Dr. Piñal y su unidad quirúrgica pasan por lograr una osteosintensis, es decir, la reducción-curación de las fracturas, que facilite una movilización postoperatoria inmediata y que reduzca los tiempos de recuperación.

A su vez, se persigue la eliminación de cualquier molestia posterior y la minimización del impacto estético del procedimiento.

Inserción de tornillo canulado en el quinto dedo de la mano izquierda
En la composición, inserción de tornillo canulado en el meñique de la mano izquierda del paciente y ‘reflejo’ en imagen fluoroscópica de la misma acción.

El plan

El Dr. Piñal emplea en este caso su técnica quirúrgica de fijación mínimamente invasiva para fracturas de falanges y metacarpianos, mediante la inserción intramedular de tornillos canulados sin cabeza, de entre 3 y 4 mm de diámetro en función del tipo de lesión. Se trata de una modalidad de cirugía ambulatoria, es decir, que el paciente obtiene el alta tras la intervención sin necesidad de estancia hospitalaria.

Este desarrollo pionero del cirujano cántabro fue descrito por primera vez en su artículo ‘Fijación Mínimamente Invasiva de Falanges y Metacarpianos con Tornillos de Comprensión Canulados Sin Cabeza’ (‘Minimally Invasive Fixation of Fractures of the Phalanges and Metacarpals With Intramedullary Cannulated Headless Compression Screws’), publicado por la revista de la Sociedad Americana de Cirugía de la Mano en abril de 2015.

Medición para tornillos canulados
La longitud de los tornillos canulados a emplear en cada caso se determina por tomografía axial (TAC).

Como primer paso clave de la cirugía, el Dr. Piñal introduce una guía metálica en cada dedo fracturado, que ajusta la reducción y permite insertar y deslizar cada tornillo canulado hacia su lugar correspondiente. La longitud apropiada de dichos tornillos es pre-establecida a través de tomografía axial (TAC).

Radiografía con tornillos canulados ya insertos
Radiografía posterior al procedimiento tras la inserción quirúrgica de los tornillos canulados en la mano del paciente.

No obstante, en fracturas conminutas, como las del paciente, la compresión sin un adecuado soporte óseo resultaría inefectiva, con lo que se realiza una estabilización axial (axial strutting) que hace que el tornillo canulado actúe como una viga sobre la base de cada falange afectada.

Idealización de la técnica de axial strutting o apuntalamiento axial
Idealización gráfica de la técnica de axial strutting o estabilización axial utilizada en este caso, que evita el colapso de la fractura por falta de sustentación aun tras una reducción adecuada.
En las imágenes, desarrollo de la técnica de inserción de tornillos canulados por parte del Dr. Piñal en un caso de fractura de falange media.

Tras apenas una hora en quirófano, muy por debajo del tiempo necesario en otro tipo de técnicas, al paciente se le permite comenzar a mover los dedos con inmediatez.

Los resultados

Como permite observar el conjunto inferior de imágenes, la cirugía resulta un éxito, con efectos evidentes ya en las dos primeras semanas posteriores a la intervención.

En el vídeo: recuperación funcional y estética del paciente en diversos momentos del periodo posterior a la intervención del Dr. Piñal: semana 1, 2, 3 y estado a los tres meses.

Info adicional: